Tipos de planos fotográficos: ¿cuántos existen y cuáles utilizar?
Conocer los tipos de planos fotográficos que existen es clave para la toma de nuestras imágenes.
A medida que vas dominando la técnica fotográfica de forma profesional y perfeccionando la toma de imágenes, va ganando peso la manera en la que realizar la fotografía. Cómo está iluminada la escena, si salen elementos cortados en ella, o su fondo y cómo aparece ganan protagonismo. También el encuadre de la imagen, es decir, qué parte de la escena que ves quieres que aparezca. Aprender cómo funcionan los planos te ayudará a encuadrar y a saber cómo tienes que hacerlo en cualquier situación. Descúbrelos.
¿Qué son los planos fotográficos y cuáles son los encuadres básicos para ellos?
Los planos fotográficos se encargan de determinar qué parte del objeto que consideramos principal en una fotografía aparecerá en la imagen. Es decir, que el plano no será el mismo si, por ejemplo, al fotografiar una persona, esta aparece en la imagen de la cabeza a los pies, o si solo lo hace de cintura para arriba. Cada tipo de plano tiene sus normas de uso, y tiene establecido lo que puede aparecer en él. También cómo lo hace.
Los encuadres básicos para los planos los define la posición en la que se coloca la cámara para tomar una fotografía: horizontal o vertical. Cuando se toma una foto en horizontal el resultado es similar al que podemos ver con los ojos de la escena que hemos reflejado en la imagen. Este encuadre abarca bien la imagen que quieres inmortalizar, y por eso se suele utilizar, por ejemplo, en paisajes.
Una variante de este tipo de encuadre es la panorámica, que permite hacer fotos en horizontal, sobre todo de paisajes, en las que aparece el horizonte con más amplitud que en una foto horizontal. Hasta la llegada de la opción para tomar panorámicas en cámaras y smartphones se solían hacer tirando varias fotos en horizontal una a continuación de otra y uniéndolas después con un programa digital o al revelarlas.
El encuadre en vertical es más adecuado para retratos y elementos que se quieren destacar en la parte más cercana de la imagen. En él se suele, por tanto, dar más importancia a lo que se ve primero. Por eso se utiliza sobre todo en retratos y fotografías de personas, tanto en solitario como en grupos. Pero veamos los principales tipos de planos, clasificados por el grado de angulado de la cámara y por la situación de su elemento o elementos más importantes.
Tipos de planos fotográficos según el ángulo de la cámara
Los tipos de planos fotográficos que hay en función del ángulo de la cámara con respecto al suelo son los siguientes:
- Plano normal: es el más común. Se caracteriza porque la cámara, a la hora de tomar la fotografía, tanto en vertical como en horizontal, se coloca de manera paralela al suelo. Por tanto, el objeto u objetos que aparece en la fotografía están a la altura de la cámara. Si son personas lo que sale en ella, estarán a la altura de la vista del fotógrafo.
- Plano picado: este plano se caracteriza porque la cámara, a la hora de sacar la fotografía, está por encima de los objetos o personas que quieres que aparezcan en ella. Las imágenes resultantes dan la impresión de que quien las saca está mirando hacia abajo. Se utiliza, entre otras cosas, para hacer que los objetos o personas que salen en la foto parezcan más pequeños de lo que son.
- Plano contrapicado: Este tipo de plano es contrario al anterior, ya que las imágenes se toman con la cámara desde una posición inferior a las personas u objetos que vas a hacer aparecer en ellas. La cámara, por tanto, mirará hacia arriba, que es donde estará lo que saldrá en la foto. Con ella, lo que aparece en la imagen parece ser más grande, y más importante, que en un plano normal.
- Plano cenital: la cámara está sobre la persona u objeto de mayor importancia que aparecerá en la foto. La imagen se saca mirando hacia abajo, y de manera directa hacia el suelo. Es bastante menos común que el resto de planos.
- Plano nadir: es el plano opuesto al anterior, y también es bastante poco común. La cámara se pone por debajo de la persona u objetos que salen en la foto, mirando hacia arriba de manera directa.
- Plano holandés: también llamado plano aberrante, toma como referente para el ángulo de la cámara el horizonte en vez del suelo. En las imágenes que utilizan este tipo de plano, el horizonte no aparece en horizontal, sino que lo hace en vertical.
Tipos de planos fotográficos según la posición del elemento principal de la fotografía
En función de la situación que tiene la persona o el objeto que tiene la mayor importancia en una foto, los tipos de plano son los siguientes:
- General: el elemento principal está en la imagen, pero no ocupa una posición destacada. Sigue teniendo importancia, pero se ve rodeado de paisaje, sin destacar sobre él. Por ejemplo, es lo que sucede al fotografiar una persona, algo de lejos, en un bosque.
- Entero: la persona o el objeto que tiene que tener más protagonismo aparece completa, sin cortar, en la fotografía.
- Americano: suele utilizarse en retratos individuales o de grupo. Las fotografías que usan este plano muestran aproximadamente 3/4 partes de la persona o personas protagonistas de la imagen. El corte de la foto se realiza, aproximadamente, a la mitad de sus muslos.
- Medio: el plano medio muestra a quienes salen en la foto de cintura para arriba. Tiene dos variantes: el plano medio largo, en el que el corte se realiza en la altura de la cadera, y el plano medio corto. En él, el corte de la fotografía se hace por la zona que queda justo bajo el pecho.
- Primer plano: el enfoque de quienes aparecen en una fotografía se hace por debajo de los hombros. Justo por encima del pecho. El foco de la imagen, en este caso, se centra en la cara. La variante conocida como Primerísimo primer plano muestra únicamente la cara.
Estos son los principales tipos de planos fotográficos que hay. Para dominarlos solo tendrás que practicar un poco. Eso sí, tienes que saber que no son exclusivos, ya que se pueden combinar los distintos encuadres para obtener fotografías, por ejemplo, con un primer plano picado de un rostro. Es cuestión de práctica dominarlos para sacar distintas fotografías que provoquen emociones diferentes con distintos encuadres.