

Estas campañas son muy utilizadas hoy día y también muy efectivas. Están siendo estudiadas, pero por lo general hay un componente de suerte que no puede aplicarse a todas. Aunque sí que las que están bien diseñadas consiguen el gran impacto deseado y esperado. Las personas pueden consultar las características más detenidamente cuando hacen comparaciones cuando van a adquirir un producto. Pero para conocer la marca, el logro y el nombre y recordarlo necesitan del storytelling. Y, además, este debe ser claro y no cambiar. La identidad corporativa debe quedar clara desde el primer momento.
Diseñar productos de cualquier tipo es, no solo imaginarlos, sino también fabricarlos. Frente a un mercado que ofrece cientos de productos similares a los clientes, se han de tomar medidas para diferenciarse. Es por eso que hablar del proceso del diseño puede ayudar a publicitarlo. Solo ha de hacerse de forma emotiva. Y esto no tiene por qué ser una estrategia diseñada fríamente. Realmente, el diseño puede haber sido una experiencia emotiva y verídica. Ahora no solo se consumen los objetos sino todo lo que les rodea. Y, además, apelar a los sentimientos siempre hace que se recuerde más y durante más tiempo. También es más compartido en redes sociales, tiene posibilidad de volverse viral y el público es mayor.
Claves para que la estrategia de comunicación sea exitosa:
Si en el presente ya es tan efectiva la estrategia de comunicación publicitaria, solo hace falta ver que los proyectos transmedia y la publicidad mucho más trabajada será la más efectiva. Donde antes se hacía un envase con un logo reconocible, ahora se debe hacer un packaging cuidado para que eso genere vídeos de unboxings de productos y sean los propios clientes los que a su vez hagan publicidad. Ahí reside su fuerza.