diseño de tipografía

Cómo saber qué tipografía usa un logo

Cada una de las fuentes que encontramos en tipografía tiene sus propias características y nos transmite sensaciones diferentes. Aprender a reconocerlas nos ayuda a elegir entre usarlas o tenerlas como inspiración. 

Autor: Agustín Pérez
Diseño gráfico
6 de Mayo de 2025

Seguro que alguna vez te has encontrado con una tipografía que te ha llamado la atención, ya sea navegando por una web o viendo un cartel o un logo. Para quienes trabajan en diseño gráfico, o simplemente sienten curiosidad por el tema, reconocer una fuente va más allá de la estética; es una forma de inspirarse, de aprender y de aplicar estilos similares en sus propios proyectos.

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¿Por qué identificar una tipografía es importante en diseño gráfico?

La elección de una tipografía no es solo una cuestión de gusto, sino que es parte del proceso de creación de la identidad visual de una marca. El equipo de diseño debe ser capaz de identificar fuentes para poder replicar su estilo y aplicarlo a la marca en cuestión. Al mismo tiempo, se podrán descartar aquellas que no encajan con la imagen que se desea transmitir.

Esta capacidad sirve para evitar errores visuales, pero también ahorra tiempo en aquellos proyectos en los que hay que imitar o actualizar una marca existente. Además, si se conocen bien las tipografías, será más sencillo que la fuente funcione con el tono, el contexto y el medio.

El impacto de la tipografía en una marca

La tipografía cumple una función estética, pero no es la única que tiene. Sirve para dar uniformidad a la comunicación de una marca en sus diferentes soportes gráficos. Pero también para dar mensajes claros y transmitir la personalidad de aquella. Es decir, que tiene el poder de reforzar el posicionamiento y los valores de la empresa. De ahí que sea importante elegir la adecuada.

Por otra parte, cada tipo de letra comunica sensaciones distintas. Por ejemplo, una fuente geométrica y limpia puede transmitir innovación, mientras que una serif clásica genera confianza. Si no se alinea con la identidad y los valores de la marca, puede repercutir negativamente en su imagen y tener un impacto más bajo en la audiencia. Por eso, los equipos creativos y de diseño dedican tiempo a analizar, clasificar y reconocer fuentes antes de aplicarlas.

Casos de éxito

IKEA utiliza la fuente Noto Sans, sencilla y clara, para reforzar su identidad funcional y accesible. Google cambió su tipografía a Product Sans para reflejar modernidad, cercanía y adaptabilidad digital. En ambos casos, la elección no solo responde a una cuestión visual, sino que es más bien estratégica. La tipografía les ayuda a construir una imagen de marca fuerte, reconocible y coherente en cualquier formato o espacio. 

Herramientas para saber qué fuente utiliza un logo

Identificar una tipografía es más sencillo de lo que parece, puesto que hoy en día disponemos de herramientas online que se encargan de hacerlo. El método más común consiste en subir una imagen del logo, recortar la parte con el texto y dejar que el sistema de reconocimiento analice la forma de las letras.

Algunas herramientas utilizan inteligencia artificial para comparar la imagen con bases de datos tipográficas. Mientras que otras hacen preguntas sobre las características de la fuente. La elección de una u otra dependerá del tipo de imagen, la nitidez del logo o si tienes una idea aproximada de la fuente. A continuación, te dejamos las herramientas más populares.

WhatTheFont

WhatTheFont es una de las herramientas más populares y sencillas. Solo hay que subir una imagen del logo y el sistema detecta automáticamente las letras. Funciona bien, incluso si están ligeramente distorsionadas, aunque lo idea es que las imágenes sean claras y sin fondo. Usa reconocimiento visual y cuenta con una base de datos de fuentes comerciales bastante extensa. Es útil si se buscan resultados rápidos y no se tiene información previa sobre la tipografía. 

Font Squirrel

Font Squirrel no es un detector de fuentes, sino un catálogo de tipografías gratuitas con licencia comercial. Aunque no permite identificar directamente una fuente desde una imagen, es extremadamente útil si ya conoces el nombre aproximado o quieres encontrar alternativas parecidas a una fuente comercial. Tiene filtros muy detallados por categoría, estilo, grosor, espaciado, ancho y uso. También puedes probar texto personalizado para ver cómo queda cada tipografía antes de descargarla.

Matcherator

En Matcherator, se sube una imagen y después se puede ajustar manualmente cada letra para afinar el resultado. Por tanto, es bastante precisa cuando las imágenes no son claras o cuando tienen un texto irregular. Si buscas fuentes sin coste, también te servirá para identificar aquellas que son gratuitas. 

Identifont

Identifont tiene un funcionamiento diferente. No analiza imágenes, sino que guía el proceso con preguntas sobre la forma de las letras. Por ejemplo, si tiene remates, cómo se describe una letra en concreto, si la barra horizontal es recta o curva, etc. Es útil cuando no se tiene una imagen, sino que se recuerdan algunos rasgos concretos de la tipografía. También permite buscar fuentes similares a otras conocidas.

Otras opciones

Además de las herramientas mencionadas, también puedes apostar por instalar extensiones. Por ejemplo, WhatFont para navegador. No hay que subir imágenes, sino que detecta directamente las fuentes de las webs. Adobe Fonts y Google Fonts también sirven para buscar por estilo visual, grosor o proporciones. Y si trabajas con comunidades creativas, en foros como Reddit o Typophile, te pueden ayudar a identificarlas manualmente. 

Consejos para identificar fuentes manualmente

Si no cuentas con una herramienta automática o prefieres identificar la fuente manualmente para afinar tu ojo, hay algunos trucos. Puedes observar detalles como los remates (serifas), la altura de las x, el contraste entre trazos gruesos y finos, la forma de las curvas o el ángulo de inclinación de las letras.

También se pueden comparar letras como la “g”, la “a” o la “Q”, ya que suelen tener formas distintivas entre familias tipográficas. Con el tiempo, estas diferencias se vuelven más fáciles de reconocer, y se puede asociar un estilo con ciertas fundiciones o épocas. Ten en cuenta que, cuanto más trabajas con tipografías, más fácil resulta detectar patrones y estilos, como demuestran algunos referentes históricos del diseño moderno como la Bauhaus y su legado en el diseño gráfico.

Para ganar experiencia visual, prueba a revisar catálogos, practicar con ejercicios de comparación y prestar atención a las fuentes en tu entorno, como en revistas, webs o carteles. No es necesario recordar el nombre exacto de cada una, pero puedes aprender a identificar si es una sans-serif geométrica, una humanista, una slab o una display decorativa, y buscar en esa dirección.

¿Qué hacer una vez reconocida la tipografía?

Una vez que has identificado la tipografía de un logo o diseño, debes comprobar si puedes utilizarla legalmente en tu proyecto. Algunas fuentes están disponibles para su uso libre, pero otras requieren una licencia, sobre todo para fines comerciales.

Antes de usarla, revisa las condiciones de uso establecidas por la fundición tipográfica o el autor. En España, el uso no autorizado de una tipografía con copyright puede considerarse una infracción de los derechos de propiedad intelectual, tal y como se indica en la Ley de Propiedad Intelectual (Real Decreto Legislativo 1/1996).

Cómo usarla legalmente

Para utilizar una tipografía de forma legal, primero debes confirmar si es de pago, de uso libre o si tiene una licencia limitada. Muchas fuentes comerciales requieren una licencia por dispositivo, por usuario o incluso por tipo de uso (web, impresión, app, etc.).

En España, como en otros países de la UE, utilizar una fuente sin respetar su licencia puede acarrear sanciones legales. Para evitarlo, lo mejor es adquirir la licencia directamente desde el sitio oficial de la fundición o a través de distribuidores autorizados, como MyFonts, Adobe Fonts o Linotype. Guarda siempre el comprobante de compra.

Alternativas gratuitas similares

Si la tipografía que has identificado es de pago y tu presupuesto es limitado, puedes buscar alternativas gratuitas que tengan un aspecto parecido. En plataformas como Google Fonts, Font Squirrel o DaFont hay opciones gratuitas con licencias abiertas, muchas de ellas aptas para uso comercial.

No obstante, siempre conviene revisarla licencia individual de cada fuente, ya que algunas requieren atribución o están restringidas a usos personales. Font Pair o FontInUse son herramientas que te pueden ayudar a encontrar sustitutas que tengan una apariencia similar a la que quieres, pero sin infringir derechos. Tal y como decía la filosofía funcional y accesible que marcó los 100 años de la Bauhaus.

La tipografía define el tono, la legibilidad y la personalidad de una marca o proyecto. Saber identificar, analizar y aplicar tipografías con criterio es una habilidad que cualquier persona dedicada al diseño necesita, tanto en entornos digitales como impresos. Si quieres adquirir estos conocimientos y aprender a trabajar las fuentes en entornos profesionales, inscríbete en nuestro máster. 

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